Me doy la vuelta entre mis sábanas aún con los ojos cerrados y lo apago de un golpe acompañado de un gemido seco. Abro los ojos y me quedo mirando al techo durante unos instantes, me da una pereza enorme ir a clases, pero es la última semana antes de las preciadas vacaciones de Navidad. Oh, amaba esa época, luces, adornos, familia, amigos, amor, paz, nieve y frío, sin duda, era la mejor época del año. Me levanté pesadamente de la cama posando mis pies en el frío suelo y dirigiéndome como un zombie aun medio dormida hacia la ducha.
Después de una tibia ducha, salí y me vestí:
Me sequé un poco mi roja melena y me hice una coleta alta medio desecha. Me dirigí hacia la cocina canturreando una balada de rock y me preparé una taza de chocolate caliente. Niall prometió a Bego ir a buscarla hoy para ir a clases, así que tendré que ir andando, terminé mi chocolate, junté todos los libros y libretas de las diferentes materias que me tocarían hoy y me dirigí hacia la puerta con mi mochila negra lisa con varios pins de diferentes grupos adorados por mi. Antes de salir por la puerta cogí mi chupa de cuero, la cual me regaló mi madre mi cumpleaños pasado, la amé desde el primer momento que la vi.
Caminaba tranquila por las calles, fijándome en las madres con sus hijos llevándolos tranquilas al colegio entre sonrisas. Entre canción y canción llegué al campus y allí encontré diferentes grupitos de gente, los frikis, los nerds, que entre ellos estoy yo, aun que no me lleve bien ni con ellos, las populares, las mojabragas, los chicos malos, y la gente medianamente normal. Entre grupo y grupo divisé la cabellera castaña de Louis y me dirigí hacia él.
Louis: ¡Hey!-gritó moviendo su mano para hacerse más visible- buenos días, pelirroja-dijo ya cuando me encontraba a su lado con una preciosa sonrisa dibujada en su cara-
Tú: Buenos días, zanahorio-dije contenta-
Louis: ¿Qué tal llevas las notas?-dijo curioso- ¿crees que aprobaras?
Tú: Tengo el trabajo hecho-sonreí- tan solo me queda hacer el último examen de Física, ¿y tú como lo llevas?
Louis: ¡Odioso!-dijo en una especie de chillido femenino, reí altamente- es tremenamente odioso, creo que me quedará Biología, y pensaba pedir ayuda a cierta amiga pelirroja...-dijo con una dulce voz-
Tú: Encantada, Lou-reí dulcemente-
Louis: ¡Prometo pagarte!-rió y me abrazó fuertemente-
Tú: ¿Una taza de chocolate con dulces de zanahoria?-reí en su pecho-
Louis: ¡Oh, sí!-dio pequeños saltitos aun conmigo entre sus brazos- sería genial-deshizo suavemente el abrazo y fijó su mirada curiosa por encima de mi- ¿pero qué coño...?
Me giré curiosa hacia donde miraba Louis y mis ojos se abrieron como platos acompañados de mi boca, Harry estaba hablando animadamente con Niall y entre risa y risa se pegaban pequeños golpes en el hombro, quién también estaba unida Bego. Niall nos divisó e hizo un gesto hacia Harry y Bego para que los siguieran. En menos de un minuto se encontraban delante de nosotros.
Harry: Buenos días Lou-dijo con una esplendida sonrisa haciendo que en su mejilla izquierda se dibujara un pequeño hoyuelo. Su mirada se posó en mi, entristecida y eufórica al mismo tiempo- Buenos... días... ____(tn).
Tú: Hola.-dije seca y sin mirarle apenas-
El timbre sonó justo cuando Harry iba ha decir algo, sin mirar a nadie más, me dirigí hacia dentro de la Universidad con la mirada posada en mis pies. De verdad, no entiendo a Styles ¡y mucho menos a Niall! Entre pensamiento y pensamiento me choqué con alguien y me caí al suelo de espaldas.
Tú: Lo-lo siento, de verdad-dije mirando a la persona con la cual me había chocado-
Cindy: Maldita estúpida-chilló con su voz de pito- ¡por poco me caigo!-dijo mirándome desde el suelo con superioridad-
Harry: Será mejor que te vayas, Cindy-dijo su voz ronca y grave desde mi espalda-
Cindy: Pero Haz...-dijo a modo de queja poniendo pucheritos-
Harry: Cindy, ¡vete! antes de que te golpeé-dijo gritando un poco más alto-
Y Cindy se dio media vuelta y pegó un pisotón en el suelo caminando mal humorada.
Harry: ¿Estás bien?-dijo ayudándome a levantarme-
Tú: S-sí-dije aturdida- estoy... genial-mi garganta se secó de repente cuando una sonrisa se formuló en la boca de Harry, un hoyuelo se dejó ver y mis ganas de acariciarle su mejilla, crecieron- gr-gr-gracias, Styles...
Harry: Un placer, pelirroja-y de repente, me abrazó sin más, dejándome con el corazón encogido. Deshizo lentamente el abrazo, y me besó la frente y después de está extraña ayuda, caminó en dirección hacia clases regalándome una sonrisa llena de felicidad y dejándome allí quieta parada, con mi corazón latiendo al compás de sus sonrisas-
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